(Gurabo) Señor, necesitamos de tu gracia para poder tener un encuentro de amor en esta meditación porque queremos responder a tu llamado, como lo hizo Mateo según San Marcos 2, 13-17 .
En este nuevo año no sólo queremos escuchar tu Palabra sino decidirnos a hacerla vida. Danos la fortaleza para hacer la opción por Ti en esta oración.
En esta madrugada luego de un largo tiempo sin reunirme y desconectado de la corriente de vida agradezco a Dios Padre por este día porque nuevamente nos convocamos como una gran familia nunca me había sentido tan feliz y contento de compartir nuevamente de una madrugada.
En esta madrugada luego de un largo tiempo sin reunirme y desconectado de la corriente de vida agradezco a Dios Padre por este día porque nuevamente nos convocamos como una gran familia nunca me había sentido tan feliz y contento de compartir nuevamente de una madrugada.
Para record fuimos convocados por la Mater alrededor de dieciséis madrugadores para alabar y adorar a nuestro Señor Jesucristo en esta mañana. Señor escucha nuestra petición –“Jesús, ayúdanos a saber ignorar el «qué dirán» para responder siempre con generosidad a tu llamado.”
Que interesante y que alegría la vocación de Mateo sería algo así como el haberse ganado la lotería. ¡Premio mayor! Mateo, el publicano, se llevó el premio mayor. El leproso recobró la lozanía en su piel. El paralítico volvió a andar y además se le perdonaron sus pecados. Pero Mateo, se quedó con la mejor parte: elegido para seguir a Cristo, y además de los primeros doce.
El caso de Mateo es especial. Él no era pescador. Era un hombre de negocios y podemos suponer que le iba bastante bien. Pero a diferencia de lo que muchas veces nos pasa, él no estaba apegado. Pasó Cristo por su vida y como dijo el Maestro en la parábola “lo dejó todo para comprar el terreno donde estaba el tesoro escondido”. Esto nos habla de que hay vocaciones ocultas incluso bajo los ropajes de una vida exitosa. Y de hecho, Cristo no riñe nunca con Mateo porque era rico. Pues Mateo antes de partir con Jesús a extender el Reino decidió hacer una fiesta: ¡porque es un gran acontecimiento ser llamado! Y porque no tenía su corazón apegado a los bienes de este mundo.
El caso de Mateo es especial. Él no era pescador. Era un hombre de negocios y podemos suponer que le iba bastante bien. Pero a diferencia de lo que muchas veces nos pasa, él no estaba apegado. Pasó Cristo por su vida y como dijo el Maestro en la parábola “lo dejó todo para comprar el terreno donde estaba el tesoro escondido”. Esto nos habla de que hay vocaciones ocultas incluso bajo los ropajes de una vida exitosa. Y de hecho, Cristo no riñe nunca con Mateo porque era rico. Pues Mateo antes de partir con Jesús a extender el Reino decidió hacer una fiesta: ¡porque es un gran acontecimiento ser llamado! Y porque no tenía su corazón apegado a los bienes de este mundo.
El papa Benedicto XVI en su mensaje del 20 de agosto del 2011 nos dice –“Qué hermoso es saber que Jesús te busca, se fija en ti y con su voz inconfundible te dice también a ti: "¡Sígueme!". Queridos jóvenes, para descubrir y seguir fielmente la forma de vida a la que el Señor os llame a cada uno, es indispensable permanecer en su amor como amigos. Y, ¿cómo se mantiene la amistad si no es con el trato frecuente, la conversación, el estar juntos y el compartir ilusiones o pesares? Santa Teresa de Jesús decía que la oración es "tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos ama". Os invito, pues, a permanecer ahora en la adoración a Cristo, realmente presente en la Eucaristía. A dialogar con Él, a poner ante Él vuestras preguntas y a escucharlo. Queridos amigos, yo rezo por vosotros con toda el alma. Os suplico que recéis también por mí. Pidámosle al Señor en esta noche que, atraídos por la belleza de su amor, vivamos siempre fielmente como discípulos suyos. Amén.
¡Aquí estamos Señor! Pídenos lo que quieras… y danos el amor para saber responderte. Danos la fuerza de voluntad y la humildad para cambiar lo que tengo que cambiar para convertirme es un auténtico discípulo y misionero en tu Iglesia. Sabemos que cuando un corazón te posee, entonces te comunica, te da a los demás, porque mis palabras, mis gestos, mi testimonio me hace instrumento de tu amor.
Ayúdanos a aprovechar el tiempo libre en esta semana para hacer una visita pausada a Cristo Eucaristía.
Un abrazo fraternal,
Pedro E. Torres Cartagena
Madrugador de Maria
Cayey, Puerto Rico
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