domingo, 13 de marzo de 2011

Honor y gloria a ti, Señor Jesús. – Madrugada del 12 de marzo del 2011.

(Gurabo) – Ha sido una semana interesante con eventos como el terremoto de Japón, “al otro extremo de ‘nuestra’ tierra”, como muy bien dicho escuche mencionar hoy; me hizo entender que Japón no esta tan lejos como imagínanos sino más cerca de lo que entendemos y me hizo entender que somos uno ante Dios y en esta madrugada el espíritu santo se hizo manifestar con la participación de los madrugadores en su reflexiones.

Nos reunimos en la parroquia San Francisco Javier de Gurabo la mayoría del grupo de Guavate, algunos ocho madrugadores, dieciséis de los madrugadores de Gurabo y este servidor; en total veinticinco almas sedientas del espíritu en oración y alabanza al Creador y Señor; para lo que luego conoceríamos como la mañana del “Honor y gloria a ti, Señor Jesús”. Y esta es la razón del porque “No quiero la muerte del pecador, sino que se arrepienta y viva, dice el Señor.
Comenzamos la ceremonia compartiendo la oración de la invocación del espíritu santo versión del Padre Kentenich, pidiendo por la salud de madrugadores y sus familias, en especial por Padre Mario Maestrangelo, los vecinos de Navarro y  sus familias, nuestras intenciones por Japón y las personas que murieron y están heridas o dejadas a la intemperie y con todos ellos en mente, un cantico a María, quien nos convoca al encuentro. Seguido por las laudes y la liturgia de la palabra que para el día de hoy fueron las siguientes; en la primera lectura tomada del Libro de Isaías capitulo 58, versículos del 9-14, el Salmo 85 y el Evangelio tomada de Lucas capitulo 5, versículos 27-32.
En la primera lectura Isaías 58, 9-14; ¡esto dice el Señor!, y más claro no canta el gallo, sin renuncias a nuestra maldad como la opresión, gestos amenazantes y las palabra ofensiva en nuestras relaciones con los demás; sin el desprendimiento;  hasta que no compartamos nuestro pan con el hambriento y saciemos la necesidad del humillado, no brillará nuestra luz en las tinieblas, no podremos ser como un mediodía en nuestra oscuridad. Dios nos deja saber que somos importantes para él y no quiere la muerte para nosotros sino la vida en plenitud y gracia, nos asegura que nos dará reposo permanente; y en los desiertos de nuestras vidas nos saciará nuestra hambre y nos dará vigor al cuerpo y seremos como unos huertos bien regados de abundantes frutos, como manantiales que no se agotan llenos de vida. Además de todo esto lo más importante es que nos permite que construyamos y edifiquemos sobre nuestras viejas ruinas que reparemos las brechas y nuestros hogares destruidos. Y nos invita a que guardemos un día para él; donde no busquemos nuestro interés ni nuestros asuntos sino que hagamos de él nuestra delicia y gozaremos como nos promete y cumplirá, “Te asentaré sobre mis montañas, te haré gustar la herencia de tu padre Jacob”.
En la recitación del salmo responsorial repetimos en un sola voz “Contempla Señor a la Madre de tu hijo, y escúchanos”, recordándonos el rol de María, de nuestra Mater, quien toma perfecto cuidado de todas las cosas, acciones y peticiones que le pedimos con su intercepción por nosotros sus hijos.
En el evangelio de San Lucas 5, 27-32 nos enseña la buena nueva del Evangelio que consiste precisamente en que Dios ofrece su gracia al pecador. Si hacemos referencia a otro pasaje de la biblia, con la famosa parábola del fariseo y el publicano que subieron al templo a orar, Jesús llega a poner a un publicano anónimo como ejemplo de humilde confianza en la misericordia divina: mientras el fariseo hacía alarde de su perfección moral, "el publicano no se atrevía ni a elevar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: ‘¡Oh Dios, ten compasión de mí, que soy pecador!’". Y Jesús comenta: "Os digo que este bajó a su casa justificado y aquel no; porque todo el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado" como dice en (Lucas 18, 13-14). Por tanto con la figura de Mateo, en este evangelio se nos enseña una auténtica paradoja: que quien se encuentra aparentemente más lejos de la santidad puede convertirse incluso en un modelo de acogida de la misericordia de Dios, permitiéndole mostrar sus maravillosos efectos en su existencia donde todos estamos incluidos.
Con todas esta buenas noticias presenciamos la presencia de espíritu en esta mañana porque parecía debíamos responder a tanta bondad del Padre.
Primero nos conmueve el testimonio del compadre madrugador de Guavate quien compartió su testimonio de la Virgencita Peregrina de visita en su casa, donde con fe y confianza se la ofreció a un compañero de trabajo quien pasaba una situación delicada en su casa con su esposa enferma sobreviviente de cáncer y su nieta enferma también donde no le aseguraban, luego de varios días recibió una llamada del compañero de trabajo llorando y temiendo lo peor cae de rodilla para oír que la nieta se la dieron de alta y en buena salud. Dos cosas puedo agregar a esto; primero que la Virgencita vela por nosotros y su intercesión se desborda por nosotros porque también nos ama y quiere lo mejor para nosotros. Y segundo que cuando se pide con fe, Dios mismo nos ha dicho, moveremos montanas, la perfecta combinación es mucha fe, oración y el deseo de que lo que pedimos ya esta concedido si está según la voluntad de Dios.
También vimos como el espíritu se manifestaba en madrugadores ofreciéndose ante la necesidad de voluntarios en ayuda al apostolado comunitario que hacemos en Gurabo con la comunidad de Navarro. Y todo esto ocurre porque el espíritu santo está entre nosotros y estamos agradecidos al Padre Dios por tal bendición.
En una nota aparte y en relación con la cuaresma recordamos las tres acciones de gracias para la cuaresma, estas son el ayuno, la oración y la limosna, que nos ayudan a la verdadera conversión y al alcance de la santidad diaria.  
Procuremos hacer ayuno verdadero tomando los defectos que sabemos nos separan de la amistad con Dios, acompañado de oración sincera y limosna que nos haga sentir desprendimiento porque mira lo que dice el Señor, en Isaías capitulo 1, versículos 2-3 y 11,13;  “1:2 Oíd, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla el Señor: Crié hijos, y los engrandecí, y ellos se rebelaron contra mí. 1:3 El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor; Israel no entiende, mi pueblo no tiene conocimiento. 1:11 ¿Para qué me sirve, dice el Señor, la multitud de vuestros sacrificios? Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos. 1:12 ¿Quién demanda esto de vuestras manos, cuando venís a presentaros delante de mí para hollar mis atrios? 1:13 No me traigáis más vana ofrenda; el incienso me es abominación; luna nueva y día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes.” 
No hay sacrificio en no comer carne durante la cuaresma, es un sacrificio vano; si te llenas de mariscos, alcohol y drogas, tienes sexo descontrolado, maltratas a tu familia, vecinos y prójimo, sino haces lo más simple y sencillo que es ser sincero contigo mismo; encontrar tu verdadero yo tomando control de tu ser identificando estas faltas; reconociendo que lo estás haciendo mal; ofreciéndole a Dios un cambio, orando a Dios que te ayude a ser mejor persona; ayudando en tareas y proyectos que te sirvan a desprenderte de los ídolos que toman control de tu vida y te esclavizan; haciendo un sacrificio poniéndole un valor económico ($$) a estos ídolos y ofrécelos como limosna, vive la santidad y la herencia de tu Padre Jacob. 
Un abrazo fraternal,
Pedro E. Torres Cartagena
Madrugador de María
Cayey, Puerto Rico

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